Esto es Jesús en la cruz, todo rodeado de romanos custodiándolo para que no se acercara ninguno de sus fieles que se habían congregado a darle el último adiós, y grita Jesús:
--¡Pedro, acércate!--
--Pero, coño, maestro, no ves que está esto lleno de romanos?--
--¡Pedro, acércate, que tengo algo muy importante que contarte!-- contestá Jesús
Total, que Pedro resignado, empieza a avanzar hacia la cruz y ¡chas! un romano le arrea un tajo y le corta un brazo.
--¡Pedro, acércate más!-- insiste Jesús.
--Pero hombre, no ves el espadazo que me acaban de arrear, coño!-- contesta Pedro.
--¡Que te acerques, que es algo muy importante!
De nuevo Pedro intenta cruzar por en medio de la maraña de soldados y ¡zas! otro espadazo y le cortan el otro brazo. Continúa y al poco ¡zas! la pierna, y luego ¡zas! la otra pierna. Total que finalmente llega hasta la cruz, comienza a escalarla como puede y cuando ya está a la altura de Jesús le dice éste:
--¡Mira, Pedro! ¡Desde aquí se ve tu casa!--